En The Goverment Attic (una web que se dedica precisamente a hacer públicos documentos desclasificados por el gobierno de Estados Unidos) han publicado un fascinante informe de 1964. En él la CIA investiga los esfuerzos de la Unión Soviética por desarrollar un programa de experimentos centrados en la percepción extra sensorial y la telepatía.
El informe de espionaje recoge una conversación entre un agente de la CIA encubierto y un investigador de la Universidad de Leningrado llamado. D.E. Kerimov. Durante esas conversaciones informales (al parecer con abundantes copas de por medio), el profesor Kerimov ofreció algunos detalles sobre los experimentos que la Unión Soviética estaba llevando a cabo en torno a fenómenos sin explicación científica como la percepción extra sensorial o la telepatía.
Uno de los experimentos, por ejemplo, se llevo a cabo en la Universidad de Kiev, y consistía en grabar la actividad cerebral de un pianista para tratar de reproducirla en el brazo de una persona sin formación musical para ver si era posible que imitara una interpretación perfecta como si tuviera esos conocimientos. Otro experimento estaba tratando de lograr un cierto nivel de comunicación telepática cibernética entre un cerebro humano y una computadora. Los detalles técnicos de los experimentos no fueron explicados por Kerimov, quien por cierto comentaba las pruebas con una cierta dosis de escepticismo y humor.
La parte más fascinante del informe es el momento en el que Kerimov abandona el cinismo y explica al agente que los científicos de que la percepción extra sensorial es real y de que hay personas con la capacidad de percibir las ondas cerebrales de otros y usar esa sensibilidad para predecir acontecimientos hasta cierto punto.
Según el documento, la URSS no estaba persiguiendo ningún objetivo concreto con estos experimentos. Tan solo estaba tratando de valorar el potencial de estos fenómenos. De hecho Kerimov explica que ninguno de los experimentos ofreció resultados lo bastante concliuyentes como para desembocar en aplicaciones prácticas. El informe concluye que los experimentos soviéticos no suponen ningún peligro para la seguridad nacional y da por cerrado el tema. [vía Motherboard]